Asha
es un nombre de autor que quedó grabado en mi memoria desde muy niño, desde el
comienzo de mis lecturas, hacia los 3 ó 4 años, cuando aquellos Cuentos en Colores, de la casa Ramón Sopena, impactaron mi mente hasta el punto de que
nunca se borraron de allí, en particular sus ilustraciones para Caperucita Roja.
Pasaron los años y se desarrolló mi interés por los dibujantes, en particular
los autores de historietas, hasta el punto de que me convertí, casi sin darme
cuenta en un aficionado a la historieta, una de mis más fuertes y más tempranas
aficiones.
Aquel desconocido Asha, que en la editorial Sopena identificaban
como un “dibujante belga”, continuaba en mi mente y busqué, ya en Francia en
los años 60, su identidad y origen, pero todas mis búsquedas fueron
infructuosas, hasta que un día, cuando en los años 90 apareció Internet, busqué
afanosamente dibujantes e ilustradores, pues mi curiosidad permanecía intacta
conrelación a este artista desconocido.
Y,
un día, por casualidad, encontré a un dibujante caricaturista, osado, crítico y
anticlerical, que se llamaba Didier Dubucq, de origen belga y que colaboraba en
revistas satíricas a principios de siglo. Me llamó la atención el parecido
entre algunos elementos gráficos de este autor y el denominado Asha.
Así llegué
a saber que uno de los seudónimos que utilizaba era Asha, además de otros, como
Ashavérus, Boquillon. Con todo, desconocemos los detalles de su vida, incluso
sus fechas de nacimiento y fallecimiento. Esperemos que un día se haga justicia
con este autor y conozcamos más detalles acerca de él.
Su
firma apareció ya en 1901, en la revista satírica francesa L’Assiette au
Beurre. También colaboró en 1904, en la revista Les Corbeaux (Los
Cuervos), publicada en Bruselas y de contenido anticlerical, antigubernamental
y antimonárquico.
Pasó luego a París, continuando la edición de su periódico, sus
colaboraciones revolucionarias y anticonformistas, encontrando problemas de
censura también allí, hasta que Les Corbeaux desapareció en 1909.
En esta colección se publicó una serie de libros con el
personaje Pirulete, de Federico Trujillo, de gran éxito en los años 20,
contando las andanzas y aventuras del simpático muchacho. Asha ilustró los
números 11 a 16 de la colección Cuentos en Colores que contaron algunas
aventuras de Pirulete, en 1921, pero que aún estaban reeditados sin parar en
España en los años 40.
Toda esta colección de cuentos, de 20 números, fue
ilustrada magistralmente por Asha. Sus atrevidos dibujos y alusiones harían que
hoy, sin duda se prohibieran, incluso para los adultos, vista la gran cantidad
de prohibiciones aberrantes que constatamos hoy día.
Es
curioso que este ilustrador realizó algunas historietas que se publicaron en el
semanario Pierrot, y otros, en 1923 y que han sido reeditadas por Taula Ediciones, 5 cuadernos 8,7x20,5 en 2017. Parece que trabajó en Argentina entre
1927 y 1932, hasta su vuelta a Bélgica hacia 1935.
Artículo de
Agustín Riera Torres, investigador y divulgador de la historia del Cómic y
colaborador de Librería El Boletín (librería asociada a Uniliber).
Consulte el resto de artículos de Historia del Cómic:
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Historia del Cómic (X): Los vendedores
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